Las recientes celebraciones de cumpleaños de Kim Kardashian generaron controversia cuando una foto de ella sentada en el inodoro apareció en línea, dejando a los fanáticos divididos. La estrella de reality cumplió 44 años el 21 de octubre, y su amiga cercana Tracy Romulus marcó la ocasión compartiendo una serie de fotos en Instagram. Entre ellas había una foto que mostraba a Kim en el baño, una medida que rápidamente provocó reacciones en las redes sociales.
Si bien algunos fanáticos tomaron la publicación descarada con calma, a muchos no les hizo tanta gracia. En las discusiones en Reddit, varios usuarios expresaron su desaprobación, calificando la imagen de “extraña” y “vergonzosa”. Un fan comentó: “¿Por qué algunas personas piensan que las fotos del baño son lindas?”, mientras que otro señaló que era inusual que alguien de 40 años compartiera una foto así. También hubo escepticismo sobre si la foto se publicó sin el consentimiento de Kim, y un comentarista sugirió: “No hay forma de que la amiga de Kim publique una foto de ella en el baño sin su permiso expreso”.
La controversia sobre la foto de Kim no fue la primera vez que una Kardashian apareció en los titulares por una imagen relacionada con el baño. Su hermana, Kourtney Kardashian, había sido fotografiada previamente en una situación similar cuando su esposo, Travis Barker, compartió una foto sincera de ella en el baño en un tributo de cumpleaños.
El sincero mensaje de cumpleaños de Tracy a Kim, elogiándola como “la mejor madre, amiga y jefa”, se vio eclipsado por el revuelo causado por la foto del baño. La propia Kim no pareció inmutarse por la reacción violenta y respondió con humor a la publicación diciendo: “¡Dios mío, estas fotos! Es el que orina para mí ja, te amo por siempre tu viaje o muere”.
La situación pone de manifiesto cómo incluso los momentos casuales y humorísticos que involucran a celebridades pueden generar un debate sobre lo que es apropiado compartir públicamente, especialmente cuando se trata de entornos íntimos o privados. Este incidente ha reavivado las conversaciones sobre los límites de las redes sociales y las líneas borrosas de la privacidad en la vida de las celebridades.